Las viviendas modulares son en la actualidad una de las mejores alternativas que presenta el mercado inmobiliario. Son cómodas, económicas y muy adaptables a las necesidades específicas de sus habitantes. Estas tres características hacen que muchas personas se planteen la posibilidad de adquirir una de estas viviendas modulares. La evolución de las viviendas modulares desde su origen ha sido más que notable.
Modular Home trabaja con el concepto de casas modulares desde sus comienzos. Fomentando la versatilidad del concepto, y trabajando con el mejor material para conseguir sus objetivos. Este no es otro que el hormigón armado. Por ello ofrecemos las mejores soluciones en viviendas prefabricadas de hormigón del mercado nacional.
Para saber cuándo comenzó el desarrollo de las viviendas modulares hay que viajar casi cien años atrás en el tiempo. Nos trasladamos a principios del S. XX en Estados Unidos. Los primeros vestigios surgen en 1908, cuando Sears Roebuck & Company comenzó a manufacturar y vender casas por ‘paquetes’. Los interesados podían comprar estas casas a través de un catálogo en el que se ofertaban diversos estilos. Aunque no son precisamente viviendas modulares como tal, posiblemente hayan sido las primeras que disponían de su propio sistema de materiales. Los compradores, una vez tomada la decisión, recibían un completo kit con más de 30.000 piezas y un manual de instrucciones de 70 páginas.
Todo estaba listo para ponerse manos a la obra. El experimento dio muy buenos resultados. De hecho, de 1908 a 1940, fueron muchos los que solicitaron la compra de viviendas modulares a Sears, nada más y nada menos que 75.000 personas. Pero durante los años de la Gran Depresión la venta de viviendas descendió casi un 40%. Esto supuso el final de la venta de viviendas a través de catálogo, aunque la industria se reinventó y pronto tuvo la oportunidad de seguir creciendo. Este momento supone un freno a la evolución de las viviendas modulares. Por supuesto en ningún caso supuso su fin.
Después de la II Guerra Mundial muchos soldados volvieron a los EEUU con la idea de adquirir una casa. Fue tal la demanda que no había suficientes hogares para todos. Es aquí cuando la idea de Sears se une a otro gran hito de la historia, el fordismo. Las casas modulares costaban menos y eran mucho más eficientes que las móviles. En 1958, una primera casa modular de dos secciones se construyó conforme al código de construcción aplicable. Y, en realidad, este fue el momento en el que la industria de las viviendas modulares nació de forma oficial.
Durante las décadas siguientes, este sector trabajó duro para mejorar su tecnología. Era necesario para diferenciar sus productos de otros existentes en la industria. Hasta los años 80, la mayoría de las viviendas modulares eran simples rectángulos con dos o cuatro módulos. Con el avance tecnológico de la informática y de los programas de diseño asistido por ordenador, estas viviendas comenzaron a desarrollar formas novedosas y originales. La tecnología jugó un papel fundamental en la evolución de las viviendas modulares.
En los últimos 20 años la sofisticación de las viviendas modulares ha aumentado notablemente. Con los nuevos métodos y las nuevas tecnologías, grandes módulos pueden ser construidos y transportados. Ya no hay distancias insalvables. Se pueden transportar los módulos desde y hasta cualquier lugar. Logrando que estas viviendas se conviertan en una de las mejores alternativas a la hora de elegir un hogar.
Las casas modulares no son simplemente casas prefabricadas al uso. Y es que este tipo de viviendas cobran forma gracias a la unión de elementos constructivos estandarizados de cuya combinación nace una edificación que puede servir de hogar para una familia. Cada módulo, podemos decir, que es un cuarto propio, correspondiendo a un cuarto de baño, un garaje, un salón o una cocina, por ejemplo. La rapidez en la ejecución de las obras y el bajo coste que supone son algunas de sus principales ventajas.
De forma general, los módulos que compondrán la vivienda se elaboran en fábrica de la misma forma que si se tratara de un mueble. A la hora de unirlos, tan solo es necesario ensamblar los diversos elementos que la compondrán mediante el uso de la maquinaria adecuada y según el diseño preestablecido. Por esta misma razón, proceder a desmontar estas construcciones también es posible y rápido.
Esta es otra de las grandes ventajas de las casas modulares. Y es que estas edificaciones se pueden desmontar de la misma forma a cómo se construyen. Hay que decir que este proceso dependerá del material en que estén fabricadas ya que no es lo mismo aquellas elaboradas en madera que, por ejemplo, en hormigón. Gracias a que los módulos vienen preparados para ser ensamblados y desensamblados, este proceso tan solo necesita de la maquinaria y las herramientas adecuadas para llevarse a cabo. Además, esto hace posible que se puedan trasladar de un lugar a otro.
Las casas modulares fabricadas en hormigón tienen aportan otros muchos beneficios además de los ya comentados de desmontabilidad. Y es que este material es un excelente aislante acústico y con la envolvente térmica MODULAR HOME un magnifico aislante térmico. Por si fuese poco, gracias a que es un material dúctil, moldeable y muy resistente, se puede trabajar sobre él con facilidad para colocar ventanas y puertas y se corre mucho menor riesgo de desperfectos al desmontarlo.
Las casas modulares son una excelente alternativa a las casas prefabricadas y suponen una solución ideal de habitabilidad tanto para las vacaciones familiares como para cualquier época del año. Y es que estas viviendas disponen de todo lo necesario en cuanto a comodidad y pueden, además, ser desmontadas con suma facilidad y transportadas a otro lugar si es necesario. Por si fuera poco, son muy baratas y las obras se realizan en muy pocos días.
Las viviendas modulares rústicas son una manera rentable de poseer una casa en este momento. Con mantenimiento incluido, comedores formales, pisos de madera, grandes patios y varios dormitorios, las viviendas modulares pueden ser una opción atractiva para muchos. A pesar de que no son considerados de prestigio, los ahorros son innegables.
El sueño de todo el mundo de ser propietario de una casa todavía prevalece y la industria de la vivienda modular está experimentando un enorme crecimiento. Cada vez son más los compradores de vivienda que están tomando conciencia de las ventajas de ser propietario de una casa modular. Con tecnología de día, montaje de líneas y modernas técnicas de la industria es lo que nos hace superar la idea errónea de que, «las casas hechas de fábrica están mal construidas y no dan la talla ante casas construidas de manera tradicional.»
El término «construidas en fábricas» significa muchas cosas para muchas personas. Puede describir las casas construidas en el lugar mediante paneles, muros prefabricados y enviados directamente desde la fábrica hasta el lugar de trabajo. La frase también se puede utilizar para la industria de la vivienda modular – construido como secciones enteras o unidades modulares en una planta y luego adjuntada sobre una base permanente con el uso de una grúa. La evolución de las viviendas modulares de la gama rústica ha sido espectacular en los últimos años.
La idea de las viviendas modulares no es nueva, puesto que viene desde hace más de 100 años. Cuando un visionario ofreció un «hogar moderno» prefabricado en su catálogo general de primavera de 1908. Las personas lo vieron atractivo y esta idea vendió alrededor de 100.000 de estos hogares de 1908 a 1939, el uso de técnicas de línea de producción realmente comenzo después de la Segunda Guerra Mundial e hizo una contribución importante a la reducción de la escasez de viviendas en ese momento.
En la década de 1960, la industria de casas móviles realizó una división evolutiva. Una rama se convirtió en los vehículos recreativos (RVs) hasta el punto donde la casa ahora remolca el coche. La otra rama ha evolucionado en casas prefabricadas. El 95 por ciento de ellas se convierten en viviendas permanentes una vez que se transportan desde la fábrica hasta el sitio. Lo cual demuestra, que la vivienda modular también es popular en muchos países de todo el mundo.
Hoy en día, la popularidad y crecimiento de las viviendas modulares es innegable. Uno puede verlas aquí y allá; y sobre todo, es sumamente perceptible el gusto creciente de las personas que optan por uno de estos hogares, los cuales, además de verse cada vez mejor a nivel de diseño, también nos ahorran bastantes gastos. Con la evolución de las viviendas modulares rústicas de Modular Home, hemos cambiado el significado de tener una casa de campo.
Modular HOME, como empresa pionera a nivel nacional en la fabricación e instalación de viviendas modulares apuesta por la calidad. Sin olvidarnos de la economía, rapidez y personalización de sus casas modulares. Por ello contamos con una oferta de viviendas rústicas denominadas “MH“. Todas ellas ofrecen múltiples variantes dependiendo de la superficie que necesites para vivir.
Nos encontramos en una época de cambios e inestabilidad ante la que resulta difícil (si no imposible) realizar planes a largo plazo. Las familias también se han visto afectadas por esta nueva realidad, obligándolas en determinadas circunstancias a tomar decisiones de forma repentina o a cambiar una idea que ya habían asumido.
El mejor ejemplo de esto lo encontramos en las viviendas. Cuando una pareja o familia compra una casa lo hace, por norma general, basándose en su situación actual. Pero puede resultar que dicha familia crezca inesperadamente o que lo que se había imaginado como un hogar perfecto empiece a presentar carencias, como la falta de espacio. En una vivienda tradicional no tendrían más alternativas que realizar obras o cambiar de domicilio. En cambio, ante este tipo de problemas, las casas modulares presentan soluciones mucho más sencillas.
Uno de los aspectos que hace que las casas modulares gocen cada vez de mayor popularidad es lo sencillo que resulta realizar ampliaciones en las mismas. En contraposición a lo que ocurre con las viviendas tradicionales. Los módulos extra de las casas modulares se pueden ir añadiendo fácilmente a medida que las circunstancias lo vayan requiriendo. Así, por ejemplo, una pareja joven podrá adquirir un sencillo apartamento para los primeros años de convivencia. Llegado el momento cuando decidan ser padres, ampliar su vivienda con un dormitorio extra para los niños. Entre los módulos más habituales para casas modulares encontramos garajes, dormitorios, cocinas, trasteros y almacenes.
Además de esto, entre las principales ventajas de las casas modulares también está la movilidad. Transportarlas de un lugar a otro es relativamente fácil. Algo que posibilita que familias sin trabajos fijos o que consideren la posibilidad de vivir en distintas ciudades de forma esporádica puedan seguir manteniendo su propiedad. Por otro lado, las casas modulares son mucho más respetuosas con el medio ambiente. Esta es otra ventaja respecto de las tradicionales y tienen un menor consumo de energía.
Es por estos motivos que las casas modulares o prefabricadas son cada vez más populares y muchas familias recurren a ellas. Pues ofrecen una alternativa económica y llena de ventajas. Su construcción no requiere de tanto tiempo ni dinero. Es una de las ventajas respecto de las viviendas tradicionales. Y se ha demostrado que son tan estéticas y resistentes como éstas.
De esta forma las casas modulares son la opción que más se adapta a las diversas realidades familiares. Porque permiten jugar con el espacio en función de las circunstancias económicas y de las necesidades del momento.
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