Los revestimientos de los paramentos y el suelo, es una constante en la historia de la construcción. Por eso cuando pensamos en construir nuestra casa prefabricada, uno de los muchos puntos a tener en cuenta es alicatar y solar tanto sus paramentos como los suelos de la misma. Por lo general alicatamos los cuartos húmedos, y solamos todos los suelos o superficies horizontales. ¿Desde cuándo viene esa técnica de alicatar y solar los paramentos? Y por otro lado ¿a qué llamamos paramentos en construcción? Vamos a dar respuesta entre otras a esas dos preguntas.
Qué son los paramentos en construcción
Estrictamente un paramento es cada una de las caras de un elemento constructivo vertical. Esto es por ejemplo sin ir más lejos las dos caras de las paredes interiores de una casa. Ambas caras que componen un muro de cerramiento de fachada. De hecho en muchas ocasiones la gente usa el término paramento para referirse a la superficie de los muros. Así tendríamos paramentos interiores para las caras de los muros que están mirando al interior de la casa. Y paramentos exteriores para los que miran fuera de la construcción. Hay otros campos de la ingeniería en los que se usa el término paramento, por ejemplo en obras de ingeniería hidráulica los paramentos son los muros de contención de las presas.
Suelos y techos, las superficies horizontales
Ya tenemos claro que los elementos constructivos verticales que conforman una edificación se llaman paramentos. Que pueden ser interiores o exteriores. Para terminar de conocer los elementos constructivos que en líneas generales conforman una edificación nos falta conocer las superficies horizontales. Bueno en realidad nos falta ponerles un nombre. Así los elementos constructivos horizontales son suelos y/o techos. Se da la circunstancia que un mismo elemento horizontal puede hacer las veces de suelo y techo. Vamos a explicarnos por ejemplo el elemento horizontal que separa la planta baja de una casa, de la inmediata superior. Ese elemento es el techo de la planta baja y al tiempo el suelo de la planta primera.
Cuando el elemento horizontal es el que remata superiormente la construcción, también puede tener esa doble condición. Por lo general ese elemento tiene o toda o parte de su superficie preparada para ser pisada. Esos elementos horizontales de remate de edificación se llaman cubiertas. Suelen ser cubiertas planas transitables o no, o cubiertas inclinadas, que por su forma no son transitables. Como ya hemos dicho la cubierta es el techo de la última planta. En ocasiones se baja la altura del techo o se esconde éste, con el uso de los falsos techos.
Alicatar y solar, revestimientos de paredes, suelos y techos
Por lo general se tiende a usar revestimientos para dar un acabado a los elementos constructivos. Aunque puede ser un recurso decorativo, un tabique de ladrillo desnudo no es lo más agradable en una casa. Los motivos por los que revestir los paramentos y suelos, son desde meramente decorativos a la protección. Protegemos con un material que soporta bien la humedad y un uso agresivo las paredes de cuartos húmedos y de la cocina. En ese sentido alicatar ha sido siempre una gran opción, pero ojo en la actualidad con los avances de los materiales, en ocasiones no es necesario alicatar hasta el techo. E incluso hay cuartos de baño que no se alicatan. El suelo en esos cuartos húmedos suele ser de material cerámico, pero igualmente el desarrollo tecnológico de las tarimas ha puesto la madera en los suelos de nuestros baños.
Sea como fuere para revestir las paredes es necesario prepararlas. Por ejemplo si son de ladrillo se deben enfoscar y maestrear, para conseguir que los paramentos queden planos y a plomo. Ese paso de la preparación de la tabiquería interior se ha conseguido ahorrar con el empleo de la tabiquería de placas de yeso laminado. De nuevo los avances de la tecnología en ese campo, nos ha dado paneles resistentes a la humedad, al fuego, paneles con una buena insonorización acústica, etc. De tal modo que podemos elegir el más conveniente dependiendo del uso del habitáculo y de los que comparten tabique con él.
Alicatar y solar nuestra casa
Cuando usamos azulejos para revestir un suelo o una pared, estamos alicatando. La palabra alicatado proviene del árabe, de la palabra al-qataa. Como definición podríamos decir que es la acción de revestir una pared o suelo con el uso de azulejos. Por lo general el azulejo conforma un dibujo o serie, para ello se debe atender en su colocación al diseño elegido. Para colocarlo de forma que consiga el efecto diseñado. Para ser más rigurosos alicatado es cada una de las piezas cerámicas que usamos para revestir paredes o suelos. Tiene dos caras la que se fija al paramento o suelo, y otra que es la visible que es esmaltada y está decorada. Esa cara da la cualidad de impermeable al conjunto.
Los alicatados vienen en distintos formatos, los más usados hasta hace poco eran los cuadrados de quince o veinte centímetros. Pero desde hace ya algún tiempo han entrado con fuerza formatos más grandes. Es tanto una cuestión decorativa como de comodidad las que pueden hacernos decantarnos por uno u otro. La cara del alicatado que se fija, es de dos colores rojo o blanco. Esto es debido a la composición del soporte, la primera hecha básicamente de arcilla. La segunda de caolín. Los primeros pueden ser fijados tanto con mortero de cemento como con adhesivo. Y los segundo solo con este último.
El solado de nuestra casa
Cuando el material con el que queremos revestir nuestro suelo no es el alicatado, debemos elegir entre otros. Desde la tarima, el parqué, la moqueta o pavimentos vinílicos. O incluso tratar el acabado del material que conforma el suelo. Es el caso del hormigón pulido, usado en suelos de exterior o en garajes.
