Llega el calor y comienzan los habituales pensamientos en la cabeza de todo propietario de una vivienda. ¿Cómo lo puedo combatir? Del mismo modo que cuando llega el frío, las temperaturas extremas pueden ocasionarnos quebraderos de cabeza, ya que pueden influir nuestra calidad de vida.
Gracias a las nuevas tecnologías, muchos hogares están equipados con sistemas de climatización modernos que nos permiten pasar todo el año en nuestra casa con temperaturas suaves y agradables. Dos de los sistemas de climatización más comunes son la aerotermia y el aire acondicionado.
Del aire acondicionado es 100 % seguro que has oído hablar antes, o incluso que tengas uno instalado en tu vivienda. Pero, ¿conoces la aerotermia? ¿Has oído hablar de todas sus ventajas? A continuación, enfrentamos aerotermia vs aire acondicionado y descubrimos cuál es la mejor opción para pasar el verano (y el resto del año). ¡Sigue leyendo!
La aerotermia es una tecnología relativamente moderna, que se ha popularizado durante los últimos años, sobre todo en hogares unifamiliares. Se trata de un sistema que utiliza el aire exterior para generar energía. A través de una bomba de calor aerotérmica, se almacena el aire y se extrae toda su energía calorífica.
Lo más curioso de la aerotermia es que funciona incluso en situaciones de frío extremo, a la vez que permite refrigerar o calentar el aire del interior de nuestra vivienda. El resultado es que, pese a la temperatura que haga ahí fuera, disfrutarás de una sensación térmica de bienestar en tu hogar todos los días del año.
En primer lugar, el sistema de aerotermia extrae la energía a través de la bomba de calor. Después, a través de un ciclo termodinámico, se transfiere ese calor a un fluido refrigerante que circula en su interior. Gracias al compresor incorporado, ese fluido se comprime aumentando su temperatura y presión.
El fluido caliente cede su energía al circuito de calefacción o ACS de la vivienda a través de un intercambiador de calor. Una vez frío, se descomprime y regresa a la unidad exterior para volver a iniciar el ciclo.
Has de saber que los sistemas de aerotermia pueden ser de 2 tipos: el de bomba de calor aire-agua (el más común, suelo radiante ), que calienta agua para que circule por un circuito de calefacción o el de bomba de calor aire-aire, que transfiere el calor o el frío mediante splits (fancoil) directamente al aire de la vivienda.
El aire acondicionado, por su parte, es un sistema mucho más conocido que refrigera el aire extrayendo el calor del mismo. Esto se hace a través de un sistema de tratamiento que funciona con electricidad, controlando la temperatura y también la humedad del ambiente.
El funcionamiento de un aire acondicionado se basa en el ciclo frigorífico, un proceso que modifica el estado de un fluido refrigerante de líquido a gaseoso y viceversa. En este proceso, se absorbe y se libera el calor.
En primer lugar, el sistema capta el calor del interior de la estancia y lo pasa por un evaporador. El fluido absorbe dicho calor y se evapora. Este se comprime a través de un compresor, aumentando la presión.
El vapor caliente del refrigerante pasa por un condensador, donde cede su calor al aire exterior. En este proceso, el vapor se condensa y vuelve a su estado líquido. Al expandirse, se reduce su presión y temperatura, siendo liberado a la estancia en forma de aire frío.
Sin duda, lo que a la gran mayoría de propietarios de una vivienda les interesa es la eficiencia energética. ¿Esto qué quiere decir? En pocas palabras, que la cantidad de energía que utilices para aclimatar tu casa sea la mínima posible. De esta manera, el recibo de luz mensual será más asequible y podrás ahorrar a largo plazo.
La aerotermia es claramente la opción más eficiente para tu hogar, ya que aprovecha la energía que genera el aire exterior. Esta energía, por cierto, es renovable y 100% sostenible. Es difícil que el COP (Coeficiente de rendimiento) de la aerotermia no supere los 4 puntos. Esto quiere decir que generará por cada kWh de electricidad hasta 4 kWh de energía calorífica.
Por su parte, el aire acondicionado es una opción bastante menos eficiente. Su COP suele rondar entre 2 y 3, de modo que por cada kWh de energía eléctrica, generará entre 2 y 3 kWh de energía calorífica.
La única desventaja que podemos encontrar en el sistema de aerotermia es que el desembolso inicial como propietario es mayor que el de instalar un aire acondicionado. Sin embargo, lo más sensato suele ser percibir esto como una inversión. Cuando hablamos de un hogar, es mejor plantearse el consumo a largo plazo y ver hasta qué punto ese mayor coste inicial se puede amortizar con facturas más reducidas cada mes.
Por otra parte, la aerotermia emite el agua o aire a través de los circuitos de agua (suelo radiante) o aire (fancoil) combatiendo de forma extraordinariamente eficaz las altas temperaturas extremas. No solo en verano, refrigerando tu hogar, sino también en invierno, actuando como una calefacción de extraordinaria eficiencia. El resultado, a efectos prácticos, es que siempre notarás un magnífico confort en tu hogar, en cualquier época del año.
Por contra, el aire acondicionado puede ser un sistema más económico y accesible, aunque si tienes una vivienda de gran tamaño necesitarás adquirir uno de mayor coste si quieres que funcione correctamente. Por otra parte, las facturas de luz que recibirás mes a mes serán mucho mayores.
Las casas modulares, por su diseño y construcción prefabricada y optimizada por profesionales, suelen contar con una extraordinaria eficiencia energética. Para hacer esto aún más evidente y ventajoso para el propietario, añadir un sistema de aerotermia puede marcar la diferencia en tu día a día.
Gracias a su alto COP, complementas a la perfección la eficiencia de tu casa con la de este sistema. El resultado es el de minimizar todo lo posible el consumo energético necesario para climatizar la vivienda. Además, la instalación de la aerotermia en casas modulares suele ser sencilla y rápida. Los componentes se integran fácilmente en la estructura modular, con un menor tiempo de obra y costes de instalación más económicos.
Además, en concreto en una construcción prefabricada de hormigón con la inercia térmica del material, el calor o frio expedido por el suelo radiante o fancoil es aún más eficiente que el de otros sistemas modulares.
Si deseas disfrutar de tu sistema de aerotermia en una casa modular de alta calidad, no dudes en contactar con nosotros. Modular Home lidera el sector de las viviendas prefabricadas, ofreciendo casas con la máxima calificación energética y un sistema constructivo puntero en el mercado.
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