Clientes que siguen confiando en Modular Home

Sin duda los clientes deberían ser la principal preocupación de cualquier prestador de servicios. La construcción de casas prefabricadas no es ninguna excepción a esa regla comercial. Los clientes siempre han de ser lo primero, son nuestra razón de existir. Nuestro sector no tiene un tanto por ciento muy elevado de lo que se conoce como cliente recurrente. Por lo general una persona adquiere la casa de su vida una sola vez, a lo sumo dos en todo su proyecto vital. Por eso cuando en Modular Home tenemos clientes recurrentes, estamos seguros de que estamos haciendo las cosas bien.

Nuestros clientes y amigos

Al principio de nuestra andadura ocurría en contadas ocasiones. Pero con el transcurrir del tiempo empezamos a notar, y disfrutar, una tendencia que nos llena de felicidad. Empezamos a tener clientes recurrentes. Algunos quieren ampliar esas viviendas que adquirieron en su día. Es fácil la mayoría de los modelos que comercializamos están pensados para futuras ampliaciones. En ocasiones es solo instalar un porche a la vivienda, que en el momento de la adquisición no se tenía muy claro.

Otras ocasiones la necesidad de más espacio por el crecimiento de la familia, nos conlleva a una intervención mayor. Hay otros casos que nos dan mucha satisfacción, el proyecto vital de nuestros amigos echa raíces y precisan de una casa de invitados para los amigos o familia , un chiringuito para la oficina  o un estudio independiente de 20 m2 para el teletrabajo.

También nos llaman para satisfacer otras necesidades. Un edificio con un nuevo espacio que conforme un taller., un garaje MH desde 35 m2, todo lo que van necesitando , nos lo cuentan. Este trabajo producto de muchos años de esfuerzo empieza a dar su frutos y somos como una gran familia.

El cliente recurrente

Pero el cliente recurrente en sí mismo no era un objetivo primordial por la naturaleza de los servicios que prestamos. En cambio, sí que lo es fidelizar a todos y cada uno de nuestros clientes. Fidelizar de tal forma que los convirtiésemos en embajadores de la marca Modular Home. Ese objetivo sí que primordial, podemos casi asegurar hoy por hoy que lo estamos consiguiendo. Cada vez confirmamos más que nos llegan nuevos clientes fruto del boca a boca. El boca a boca, la mejor campaña de marketing jamás implementada. Porque no existe nada mejor que el consejo nacido desde la experiencia propia. Nuestros clientes son nuestros mejores embajadores, porque saben lo que es vivir en una casa Modular Home.

Somos muy felices cada vez que alguien llega por recomendación de otro que vive en una de nuestras casas, su casa. Claro está que tenemos clientes muy distintos, algunos de primera residencia, otros de residencia de periodos vacacionales o fines de semana. Algunos que han elegido nuestro sistema constructivo para el diseño y construcción de su forma de vida,  de su negocio, por ejemplo, de turismo rural. Esa variedad de clientela actual se refleja también en la variedad de los productos que ofrecemos y lo versátil que es nuestro sistema constructivo .

Villamayor, clientes que repiten

Una de las mayores satisfacciones que tiene nuestro trabajo, es ver que en pocas horas el sueño o necesidad de quien ha confiado en ti se hace realidad. Este es el caso de unos amigos que ya habían confiado en nosotros para construir su residencia. Nos han vuelto a llamar, son clientes que repiten. Nos han pedido una nueva edificación más pequeña en la misma parcela de la anterior. Para un uso muy concreto y unas necesidades muy claras. Un trabajo sencillo, en el que hemos puesto todo nuestro cariño y conocimientos. Porque es sencillo pero quizás sea uno de los trabajos más importantes de lo que llevamos de año. Y con los trabajos que hemos realizado ya, y los que estamos haciendo no es fácil decir esto. Es importante porque un cliente vuelve a recurrir a nosotros ante una nueva necesidad. Nos sentimos más obligados si cabe a responder sobradamente a sus expectativas. El tiempo nos dará la razón. El tiempo demostrará que es una inversión estupenda satisfacer las necesidades de nuestros clientes porque ellos se lo merecen. Y no albergamos dudas, ellos son nuestros mejores embajadores.